Hablamos con Jalis de la Serna sobre la compra e importación de imitaciones y falsificaciones fabricadas en China.
En este fragmento, extraído de la entrevista más extensa que nos hicieron para el programa Enviado Especial con Jalis de la Serna en La Sexta «China, la fábrica del mundo», abordamos la cuestión sobre la compra e importación de productos falsificados o imitaciones fabricadas en China.
La delgada línea entre falsificación e imitación
Hay que tener en cuenta que las imitaciones están permitidas, las falsificaciones por el contrario, no. Y es aquí donde recae la diferencia: las imitaciones son productos similares al original pero con diferente licencia o copyright.
Imitaciones: cuando no se trata de engañar al consumidor
Las imitaciones se tratan de reproducciones del original pero sin pretender hacerse pasar por el mismo. Es decir, no trata de llegar a un engaño al consumidor. El valor de una imitación es muy inferior debido a que los protocolos de calidad así como los materiales utilizados no son los mismos.
El problema reside en que la responsabilidad, en el caso de la compra e importación de este tipo de productos, recae sobre el importador, que debe ser capaz de saber si el producto en cuestión es una falsificación o imitación.
Aunque las imitaciones están permitidas, nosotros desaconsejamos trabajar con este tipo de productos, ya que pueden traer enormes quebraderos de cabeza y grandes costos.
Recuerda comprar e importar siguiendo la normativa de tu país
Independientemente de las cuestiones morales y legales al respecto de las imitaciones y las falsificaciones, es importante que conozcas bien la normativa específica de tu país a la hora de seleccionar los productos que vas a comprar en China. Hay juguetes, por ejemplo, que no superan los estándares de calidad y seguridad impuestos en Europa o Estados Unidos.